Mantenimiento de una estufa de pellets

La principal tarea para el mantenimiento de una estufa de pellets consiste en su limpieza. Las estufas de pellets no tienen piezas de desgaste. Aunque si es verdad, que se te puede quemar o desgastar una goma o junta con el tiempo, pero eso ya es un caso del servicio técnico. Vamos a ver cuales son las tareas de mantenimiento, de la limpieza de una estufa de pellets…

La combustión de los pellets es bastante limpia. En cambio, si usas otro combustible, como por ejemplo, los huesos de aceitunas la máquina se te ensucia mucho más. Si le echas pellets será suficiente con limpiar la máquina al final de la temporada, quiere decir una vez al año. Algunas máquinas suelen tener un contador de horas de trabajo que te avisa para que procedas a su limpieza. En general, una limpieza anual, o en caso de uso intensivo, dos limpiezas por año serán suficientes. No hace falta limpiar la estufa cada mes.

Las cenizas si que las tienes que sacar a menudo. Los pellets se queman muy bien, y un saco de combustible (de 15 kilos de pellets) se reduce a tan sólo unos cientos de gramos de cenizas. De esta manera sólo tendrás que sacar las cenizas una o dos veces por semana. No te compres una estufa que no tenga un cajón extraíble de ceniza. Tener que sacar la ceniza con una aspiradora no te interesa. Aunque puedes utilizar tu aspiradora para recoger los restos de cenizas de la cámara de fuego cuando saques el cajón de cenizas. Si no quieres utilizar tu aspiradora doméstica, venden unas aspiradoras tipo lata, que son baratas y no requieren filtros. También valen para vaciar el depósito de pellets a final de la temporada y hasta son útiles para limpiar el coche.

Resumiendo, el mantenimiento de una estufa de pellets durante su uso es solamente sacar las cenizas una o dos veces por semana; cuando sacas el cajón de ceniza aprovecha y limpia también el cenicero con un cepillo en seco. Ah, y no olvides de echarle pellets de vez en cuando 🙂